Todos los días las personas se distraen con diferentes tipos de informaciones. Por ejemplo, contenidos de Facebook, Instagram, novelas, películas y programas que no ayudan en nada, ocupando por completo su mente y alejándolos de las cosas realmente importantes.
De lo que no se dice mucho es que cuanto más la persona se envuelve con todo esto, más se aleja de la relación con el Autor de la vida. Es por esto que el 25 de Enero dio inicio al Ayuno de Daniel, serán 21 días para desligarse de toda y cualquier forma de entretenimiento y de cualquier cosa que lo haga apartarse de Dios.
Si usted no está participando de este Ayuno de Daniel, déjeme decirle que aún está a tiempo de hacer parte de este propósito, que se estará realizando hasta el 14 de febrero, el primer paso es tener un único objetivo: querer aproximarse a Dios y hacer lo que fuera necesario para eso.
Según el Obispo Edir Macedo, el Ayuno de Daniel es un momento único para aquellos que quieren recibir el Espíritu Santo. “Son tres semanas sólo pensando en cosas de Dios, para que el Espíritu de Él vengan sobre nosotros. Nada es más importante que su vida y ella sólo puede ser bendecida con el Espíritu de la Vida, que es el Espíritu Santo”, afirma.
Así el deja un consejo para quién quiere tener esa experiencia. “Juan el bautista dijo a los discípulos: Yo los bautizo con agua; Jesús, los bautizará con el Espíritu Santo, Marcos 1:8.
El candidato al bautismo con el Espíritu Santo, debe apoderarse de esa promesa pensando en lo siguiente: si el Señor Jesús está vivo, como lo he creído, entonces ¡esta es mi oportunidad de ser sellado! Él no puede faltar al cumplimiento de Su Palabra” orienta.
Aunque usted ya sea bautizado, el Ayuno de Daniel es para usted. “ya que es un propósito de fe sacrificial, para los que no tienen nada que perder. Es como el arca de Noé, dispuesta a rescatar a los perdidos, a avivar la fe de los que están en el fuego y renovar a los que están salvos. Quién estuviere dispuesto a abrir mano de toda y cualquier información secular, internet, redes sociales, entretenimiento, deporte, películas, teatro, shopping, músicas seculares, conversaciones inadecuadas, en fin, todo lo que desvía sus pensamientos de los pensamientos de Dios es bienvenido, quien quisiera comenzar el Ayuno de Daniel atrasado, puede hacerlo, no hay problema. Lo importante es sumergirse en el océano del Espíritu inmediatamente y desintoxicarse de este mundo”, concluyó el Obispo.
La verdadera felicidad viene de Dios
Mi vida estaba sumergida en una profunda depresión, mis celos constantes me atormentaban, día a día peleaba con mi esposo, todo lo que me sucedía me llevó a intentar suicidarme ya que no me sentía valorada.
Al llegar a la Igelsia Universal todo empezó a cambiar, empecé a ser libre de mis males, pero aún en mí, había algo que no me dejaba ser feliz.
Cuando escuché sobre el Ayuno de Daniel, empecé a dedicar completamente mi vida a Dios, ayunando, orando y apartándome de todo con el fin de alcanzar lo más preciado que quería recibir, que era el Espíritu Santo.
No fue fácil ya que me costaba mucho dejar los bailes, las salidas por la noche, pero cuando prioricé mi vida con Dios todo cambió.
Cuando recibí el Espíritu Santo, tuve paz, determinación, el vacío y la tristeza fueron arrancados y ahora vive el Espíritu de Dios.