El diezmo es el diez por ciento (10%) de todos nuestros ingresos que pertenecen a Dios. Es una práctica muy antigua, llevada a cabo por todos los que tienen temor de Dios. La primera vez que aparece en la Biblia es en Génesis 14:18-20, cuando Abram dio sus diezmos a Melquisedec, rey de Salem: el diez por ciento del botín que trajo de la victoria sobre sus enemigos luego de haber rescatado a su sobrino Lot. Las escrituras dicen: “Entonces Melquisedec, rey de Salem (Jerusalén) y sacerdote del Dios Altísimo, sacó pan y vino; y le bendijo, diciendo: Bendito sea Abram del Dios Altísimo, creador de los cielos y de la tierra; y bendito sea el Dios Altísimo que entregó tus enemigos en tu mano. Y le dio Abram los diezmos de todo”.
También es interesante ver, que la última vez que la Biblia habla de diezmo es exactamente en su último libro, en Apocalipsis 14:4, cuando se refiere a los redimidos como “… primicias para Dios y para el Cordero.”.
¿Cuánto es el diezmo? ¿Es cómo una ofrenda? Diezmo no es ofrenda y ofrenda no es diezmo, son dos cosas completamente diferentes. Diezmo es, exactamente, el 10% de mis ingresos (todo dinero que recibo), ni más ni menos que el diez por ciento. Por ejemplo, si recibo $386, mi diezmo es de $38,6; si yo recibo $500, mi diezmo es $50, etc. Por otro lado, la ofrenda es lo mejor que yo tengo y quiero dar a Dios. El valor de mi ofrenda depende de mi fe y de mi amor; el valor del diezmo es siempre el diez por ciento de lo que recibo. Pero no puedo dar ofrendas antes de dar mi diezmo. Primero se separa el diezmo y después se dan las ofrendas.
¿Qué debo diezmar? Usted debe diezmar todo lo que llegue a sus manos, que es para su uso, beneficio o placer. Esto incluye salario, horas extras, bonos, beneficios, ayuda, ganancias en su negocio, pensiones, intereses, ventas, regalos, etc. Las escrituras dicen: “Traed todos los diezmos al alfolí…”, (Malaquías 3:10). También Jacob oró a Dios diciendo: “… y de todo lo que me dieres, el diezmo apartaré para ti”, (Génesis 28:22). En definitiva, todos pueden y deben diezmar, ya que cada uno recibe algo para sobrevivir de una u otra manera.